El comienzo de una historia llena de amor, espiritualidad y vocación. Era un 3 de octubre de 1948 y en nuestra ciudad de San Vicente de Tagua Tagua, una significativa ceremonia vendría a cambiar la historia de esta congregación: ya que se fundó oficialmente el Hogar de los Sagrados Corazones cuando unas devotas damas, con el apoyo del cura párroco de aquel entonces P. Miguel Bustamante, acogieron a unas niñas sin hogar.
Un día, llegó hasta este hogar, don Salvador Correa Ovalle, quien se conmovió al ver a las pequeñas desamparadas y se comprometió a viajar a España a buscar religiosas para que organizaran, cuidaran y educaran a esas niñas. Esto sería el comienzo de todo. Desde Europa viajaron a Chile las Religiosas Franciscanas Misioneras de María, por lo que don Salvador junto a la entusiasta directora del Hogar de los Sagrados Corazones, Sor María de la Santa Faz, decidió en 1954 fundar un colegio que llevaría por nombre Santa Inés, en honor a su esposa, doña Inés Larraín Riesco.
Su primer establecimiento se levantó en pleno centro de la ciudad. Con el paso del tiempo y ante la gran demanda de matrícula, el establecimiento se hizo pequeño por lo que comenzó una verdadera “cruzada solidaria” para construir el Colegio Santa Inés que hoy todos conocen. El actual terreno fue donado por don Salvador Correa y doña Inés Larraín con el apoyo de la comunidad sanvicentina de aquel entonces. La construcción de su infraestructura se dieron inicio un 11 de marzo de 1956 con la colocación y bendición de la primera piedra.
A partir del año 1978, se hacen cargo del Colegio Santa Inés, la Congregación Religiosas Misioneras de Santo Domingo. La primera comunidad estuvo formada por cinco religiosas: Sor Lourdes Miguel, Priora; Sor Carmelina Urbano, Directora; Sor Cruz Losada, Sor Aurora Llamazares; todas ellas españolas y Sor Socorro Teófilo, filipina. Desde entonces hasta el presente, han dirigido los destinos de esta institución: Sor Carmelina Urbano, Sor Esther Fueyo, Sor Begoña Lucas y hoy Sor María Cecilia González.
Actualmente, es un establecimiento subvencionado de financiamiento compartido, que entrega educación de calidad desde preescolar, hasta enseñanza media. A lo largo de los años ha crecido en lo espiritual, intelectual, material y sobre todo en la formación integral de sus estudiantes, entregándoles las herramientas necesarias para que en un futuro sean agentes transformadores, con una mirada centrada en la inclusión y promoción de la diversidad desde lo comunitario a lo individual.